Cuando hace frío, los poros de la piel se contraen para evitar la fuga de calor. Esta contraccion sirve tambien en cierto modo para evitar la sudoración (el sudor es el mecanismo que tiene el cuerpo para mantener constante la temperatura), es decir si hace frío no necesitas sudar ni perder calor por los poros (esta contraccion también explica que los "pelitos" se erizen o que se te ponga "la piel de gallina" y el cambio de luces)
Al tener el cuerpo una cantidad alta de agua debido a la ausencia de sudor, se inhibe la liberación de la hormona vasopresina lo que provoca que en los riñones se termine por excretar el exceso de agua (pipí).
Ahora si, más claro ni el agua. Aunque yo había llegado a la conclusión de que era un reflejo condicionado de la infancia. Creo que todos los bebés alguna vez cuando les quitan el pañal sueltan el chorrito de pis. Y de noche con el pañal se mean encima... por lo que el cerebro de alguna manera guarda como una sensación placentera la de mearse encima, todo calientito en la noche cuando tienes frío y por ende, al sentir frío ya mayor, quieres hacer pipí. Pero todo tiene su parte científica y ahora resulta que es por culpa de una hormona.
que viva la orinoterapia!